Constantemente escuchamos que los grandes problemas de la humanidad podrían resolverse a través de la educación, y eso hace sentido desde la perspectiva de que la mayoría de las problemáticas globales, como son el cambio climático, la desigualdad, la inseguridad e incluso la falta de comida, por nombrar algunas; tienen su raíz en una falta de consciencia y empatía, por lo que la educación debería ser clave en la resolución de ellas. El problema es que, en el modelo educativo actual, en lugar de centrar la enseñanza en el incremento de consciencia de los estudiantes, se considera prioritaria la adquisición de conocimiento, la información y la capacitación.
Vemos a la educación como un adiestramiento en el que aprender a hacer nos llevará a desarrollar el ser, sin darnos cuenta de que somos desde el momento en el que nacemos y que la educación debe ser una guía a la autorrealización, para aumentar nuestros niveles de consciencia personales, sociales, ambientales y globales para encontrar una pasión, para traer valor al mundo y ayudar a construir un mejor futuro. Pero para ello necesitamos un sistema educativo que piense a largo plazo; educadores que estén dispuestos a innovar; y nuevas metodologías que se centren en el bienestar del individuo.
Ese es el caso del Maharishi Invincibility Institute en Sudáfrica, donde su fundador, el doctor Taddy Blecher ha desarrollado una metodología de educación basada en la consciencia para expandir las capacidades de cada uno de los estudiantes, y así no solamente aumentar el IQ, sino realmente educar hacia la felicidad y el éxito. Ha demostrado ser un verdadero movilizador social y una esperanza en el futuro de su población. La meditación y la alimentación son dos de los componentes primarios dentro de esta filosofía educativa, que a diferencia de las escuelas más reconocidas y alabadas en Occidente, en el Maharishi Invincibility Institute se asegura erradicar el estrés entre sus estudiantes, exponenciar su bienestar, su desarrollo personal y buscar la autorrealización.
El Maharishi Invincibility Institute forma así seres humanos integrales y creativos que absorben al máximo la información, que interiorizan el contenido y saben autocapacitarse a lo largo del tiempo; seres humanos capaces de pensar y de resolver problemas, de adaptarse a los cambios, de innovar y de traer valor a cualquier empresa u organización que tiene la fortuna de tenerlos dentro de sus equipos.
Cuando veo ese gran caso de éxito me lleno de esperanza, porque si Sudáfrica está logrando un cambio social tan transformador, estoy segura de que en México podemos alcanzarlo, que podemos construir un país digno y próspero, porque los mexicanos somos trabajadores y resilientes, pero no siempre conocemos las herramientas correctas para brincar hacia el éxito. Además de estar llena de optimismo, estoy convencida de que a través de una buena educación basada en la consciencia, podemos resolver muchos de los grandes problemas que aquejan a este país.
Vivian Lan Agami, CEO de SingularityU en México.