Microaprendizaje, ¿qué es y cómo aprovecharlo?

¿Cómo podemos enriquecer nuestro desarrollo escolar y profesional? Es una pregunta que, a veces, se responde con generalidades del tipo: “tomando clases sobre algo útil para nuestras carreras” o, “al inscribirnos en cursos o usar una aplicación educativa”.

Sin embargo, frecuentemente nos encontramos con la barrera del tiempo, el cual nunca es suficiente para atender nuestras actividades regulares en el trabajo. Además, asistir a un salón de clases físico o virtual.

Aunque los cursos en línea son una gran opción para estudiar, muchos requieren un periodo promedio de una hora o más para cubrir cada sesión. A eso se le debe sumar el tiempo necesario para realizar ejercicios o actividades extras.

Esto es más complejo para quienes buscan aprender algo que les agregue valor a sus vidas profesionales mientras se transportan, tienen “horas muertas” entre clases, o disponen de pequeños ratos libres a lo largo del día, por mencionar algunos ejemplos.

Muchos mexicanos están en esta situación. Según un estudio reciente de la Asociación de Internet MX, el interés de los mexicanos que usan internet para tomar cursos o estudiar subió del 42% al 57% en el último año.

Sin embargo, ese mismo organismo, al analizar los hábitos de estudio en línea de las personas, demostró que el gran impedimento para que se dé continuidad a los diferentes planes de aprendizaje online es el tiempo.

 

Nuevos formatos educativos

Ante este panorama, cada vez surgen más formatos de educación en línea para permitir que muchas personas sigan con su desarrollo académico. De esta forma, aprovechan el tiempo que les queda libre en pequeños momentos a lo largo del día.

Entonces, surgen nuevas preguntas como: ¿qué pasaría si las clases se condensan mucho más todavía, en sesiones de 15 o hasta 20 minutos? La respuesta a esto ha dado pie a una innovadora propuesta educativa, no tradicional, conocida como microaprendizaje.

Este tipo de aprendizaje se fundamenta en sesiones cortas, ya sea en video, a través de aplicaciones móviles u otros soportes digitales, donde se explica un concepto específico y de manera concreta, con la opción de hacer actividades, igual de rápidas, para así aprender algo nuevo todos los días.

Igualmente, este sistema apela a la repetición; es decir, lo aprendido se repasa una o más veces para aprovechar los procesos de la memoria y grabar bien esa idea.

 

Brevedad y disfrute: objetivos del microapendizaje

Para lograr su objetivo, existen programas, plataformas, servicios o cursos que mezclan la brevedad de los contenidos con elementos divertidos y hasta juegos. Hacer de la experiencia algo más entretenido es uno de los objetivos para quienes enseñan con este método, pues la idea no es que el aprendizaje sea monótono o lineal, sino algo disfrutable.

Así, se considera que este tipo de oferta complementa la educación formal o tradicional y enriquece la vida personal y profesional de las personas. Algunos otros de los formatos en los que se presentan los contenidos de microlearning son las infografías, los podcasts, las aplicaciones, conferencias, videos y tutoriales.

“Mucha gente piensa en la educación como una cosa que se hace frente a un escritorio, con apuntes, bajo presión, pensar durante muchas horas, ejercicios difíciles, etcétera. Es ahí donde está el gran reto para cualquier aplicación de microaprendizaje, pues debemos alejarnos un poco de este concepto y hacer sentir motivados a las y los usuarios. Debemos adaptarnos a la idea de que no es aprender o disfrutar, sino que se pueden hacer las dos”, declaró Cindy Blanco, Language Scientist en la app de aprendizaje de idiomas Duolingo.

De igual modo, el hecho de que sean videos o explicaciones muy breves, comparados a una clase regular, no quiere decir que no ofrezcan reflexiones profundas o soluciones a grandes problemáticas. De hecho hay contenidos específicos que orientan a las personas en temas laborales muy específicos.

“Por ejemplo una conferencia o video de TED, por más corto que parezca, gracias a la manera en que aprovechan el tiempo y el modo en que abordan el contenido, te puede ubicar en una posición distinta a la que tenías antes, ya que adquiriste un nuevo conocimiento. De este modo podemos decir que el microaprendizaje está en todos lados”, dijo César Loeza, director de educación de la asociación ÚNETE, dedicados a impulsar habilidades digitales en escuelas públicas.

 

Pero, ¿cómo funcionan los contenidos de microaprendizaje?

Uno de los principios del microlearning se basa en la idea de que todo tiene que ver con la memoria. Así, aunque sea extraño, se considera que mientras menos tiempo estemos frente a una clase o explicación, más fácilmente retenemos la información.

Otro de los pilares de este sistema educativo es que se busca crear conexiones entre la información que se quiere enseñar y las capacidades de la persona que quiere aprender. De este modo, la enseñanza expuesta en un breve periodo, por ejemplo a través de aplicaciones, otorga la oportunidad de conectar de manera rápida gracias a que las y los usuarios, al momento de terminar una lección, comienzan a aplicar ese nuevo conocimiento en sus actividades cotidianas.

“El corazón del microaprendizaje es construir conexiones entre la información que se enseña y las habilidades que tenga el o la estudiante. Esto, junto al aprovechamiento de las cosas ya entendidas, liga los elementos nuevos que vemos durante la sesión. Además, el hecho de que esté en una app permite acceder a ese conocimiento en cualquier momento: cuando quieras y cuando puedas”, añadió la representante de Duolingo.

Como vemos, esto puede suceder incluso si estás en un espacio o momento que no precisamente sea un ambiente educativo. Es decir, te puedes encontrar en tu casa, en el transporte o en cualquier otro lugar.

“Tienes más oportunidades de formar esas conexiones cuando y como te sirva mejor a ti, ya sea que estés en la cocina o la parada del autobús. Así es más fácil encontrar tiempo libre sin necesidad de hacernos un hueco de una o más horas para aprender, algo que resulta todavía más difícil si pasamos todo el día fuera de casa o en el trabajo”, añadió la experta.

 

Pocos elementos por cada lección

Incluso, aunque sientas que pasar horas y horas sentada frente a la computadora ayudará a que obtengas más conocimientos, puede que la información se vaya más rápido de tu mente, debido a que haces un gran esfuerzo en tratar de retener toda esa información.

“Si bien en un curso o taller puedes pasar ocho horas al día metido en un salón, eso no garantiza que, después, vuelvas a considerar o revisar toda esa información. Pensando en los procesos de la memoria, claro que podemos enfocarnos varias horas en distintos conceptos pero, si no los repasamos después, será difícil crear las conexiones cerebrales necesarias para obtener ese conocimiento”, opinó Blanco.

La clave del éxito de este tipo de enseñanza yace en ofrecer pocos elementos por lección. EdApp, firma dedicada a crear soluciones de microaprendizaje para empresas y personas, señala, según se muestra en su sitio web, que el cerebro humano es capaz de mantener hasta cinco nuevas piezas de información antes de perderse o ser reemplazadas.

De este modo, al enfocarse en pocos datos, es más probable el poder transferirlos de la memoria a corto plazo a la de largo plazo, donde permanecerán durante mucho más tiempo.

Pero, con todo y que aprender a través de procesos de microaprendizaje tiene estos beneficios, también es cierto que debemos dedicarles atención, no realizarlos a la ligera y ser constantes, para que el proceso de aprendizaje funcione correctamente.

 

Buenas prácticas para lograr un microaprendizaje efectivo

Si bien el curso de nuestro aprendizaje lo podemos fijar de acuerdo al tiempo libre que tenemos, eso no quiere decir que el proceso sea menos importante. Es fundamental determinar objetivos, para no perdernos entre la distracción y la procrastinación.

“Es importante formar el hábito de estudiar y destinar un momento o momentos del día a nuestro aprendizaje. Recomiendo terminar las cápsulas y ejercicios en el momento de la clase, si no, se aplaza esa actividad y podrían distraerse. No hay que saltarse lecciones y también hay que hacer las prácticas indicadas, mismas que tampoco requieren de una gran inversión de tiempo”, comentó César Loeza de ÚNETE.

Para lograr los objetivos, también podemos aprovechar varios recursos que nos ayudarán a mantenernos motivados para continuar, entender mejor los conceptos y aportar variedad a lo que aprendemos cada día.

“Es muy útil pensar en la experiencia como si fuera una clase. Es decir, si te gusta hacer apuntes a mano, también puedes hacerlo con las lecciones de la aplicación. Igualmente si hay una sesión que se te complica: puedes repasarla varias veces. También podemos aportar variedad para no aburrirnos. Así, en la semana puedes dedicar, por ejemplo, tres días a aprender algo nuevo y dos días para repasar”, recomendó Cindy de Duolingo.

Además, puedes apoyarte de materiales externos que no sean precisamente clases. Esto te podrá ayudar a profundizar en algunos temas que te interesan o que llamaron tu atención. “Hay cursos que cuentan con otros tipos de contenidos como podcasts, eventos virtuales, cuentos y más. Esto nos permite construir el conocimiento con mucha más diversidad”, comentó Cindy Blanco.

 

El microaprendizaje y la educación tradicional

Quizá por la naturaleza del microaprendizaje podríamos pensar que se encuentra a una distancia considerable de la educación tradicional. Sin embargo, su inmediatez y facilidad de uso hace este método el perfecto acompañante para reforzar contenidos vistos en la escuela.

Tal es el caso de aplicaciones de idiomas como Duolingo. Enfocadas en la enseñanza de idiomas de una manera entretenida y sencilla, se están haciendo populares en sectores amplios de la población estudiantil.

“En México, la época en la que más usuarios nuevos y activos tenemos es el regreso a clases. Observamos que hay una gran cantidad de profesores que, de manera orgánica, ya usan las lecciones de nuestra app como complemento a sus clases presenciales”, comentó Rebeca Ricoy, directora de marketing para Duolingo en América Latina.

Además, al preguntar a sus usuarios cómo se han enterado de la aplicación, han descubierto que ya existe un gran trabajo de recomendación. Estas sugerencias animan a otros estudiantes e incluso a padres de familia a iniciar sus cursos de inglés u otros idiomas.

“Al preguntar a usuarios sobre cómo conocieron la aplicación, es impactante ver cómo la mayoría indicó que se enteraron porque sus profesores les pidieron descargarla. También hay casos de padres y madres que decidieron sumarse. Esto seguirá siendo tendencia e irá creciendo durante los próximos años”, agregó Ricoy.

Es importante destacar que el acercamiento a la tecnología y el uso que le damos nos permite adaptarnos fácilmente a este tipo de herramientas educativas. Esto hace que el aprendizaje sea más eficiente y que el proceso se haga de manera más natural. También es importante resaltar la amplia accesibilidad para adecuarse a las habilidades y necesidades de cada persona.

 

¿Por dónde puedo empezar?

Una de las grandes ventajas del microaprendizaje es que se puede adaptar a muchos temas, materias, conceptos y disciplinas. Así, puedes encontrar en internet distintas opciones que pueden ayudarte para aprender un nuevo idioma o adquirir habilidades de marketing digital, por ejemplo.

Apps y servicios hay muchos, cada uno con sus métodos y estrategias para motivarte. Si no sabes por dónde empezar, no te preocupes, aquí te recomendamos algunos.

 

Duolingo

Aprender un nuevo lenguaje requiere dedicación, pero puedes hacerlo de manera divertida con esta aplicación. Aquí podrás hacer sesiones cortas de alrededor de 10 minutos. Las actividades son entretenidas y te permitirán escribir, elegir palabras, escuchar y hasta hablar, para avanzar en lo que parece un juego. Tu progreso es medido a través de niveles que, al ser completados, te otorgan coronas y gemas para canjear elementos de ayuda.

Puedes practicar todos los días e, incluso, repasar lo ya visto para adquirir un nuevo nivel dentro de la app y mejorar tus habilidades.

Puedes descargar esta aplicación desde la App Store de iOS y Google Play en Android.

 

Grasshoper

Esta aplicación es una gran opción para todas y todos los que están interesados en aprender sobre programación. A través de acertijos y ejercicios sencillos podrás conocer conceptos básicos de código que te ayudarán a formar habilidades para crear páginas y aplicaciones web.

Puedes estudiar desde tu celular; pero en ejercicios más elaborados, deberás pasar a la computadora y continuar desde el punto donde te quedaste en la app. El progreso se actualiza de manera inmediata en cualquier plataforma que utilices.

Grasshoper está disponible para iOS, Android y PC.

Únete Academy

Esta plataforma está especialmente dirigida a profesores. A través de nano cursos y webinars, enseña sobre el uso y aprovechamiento en clase de herramientas digitales. Además cuentan con un apartado dedicado a metodologías, es decir, aquellas prácticas, estrategias y modelos pedagógicos que maestras y maestros pueden aprovechar para sacar el mayor provecho del proceso de enseñanza y aprendizaje con sus estudiantes.

También pueden aprender a acomodar los contenidos que se verán en clase, así como diseñar esta para utilizar de manera óptima el tiempo.

Únete Academy puede descargarse en dispositivos Android y iOS, sin ningún costo.

 

Google Actívate

Esta es una plataforma que engloba diferentes temas y disciplinas como marketing digital, cloud computing, desarrollo de apps, desarrollo web o comercio electrónico. Cada curso es de aproximadamente 40 horas de duración. La ventaja es que cada lección consta de videos cortos que puedes ver cuando quieras y donde puedas.

Además, al final de un cierto número de lecciones podrás hacer exámenes donde podrás demostrar que has aprendido lo visto. También, una buena parte de sus cursos te permiten certificarte completamente sin costo.

Accede desde learndigital.withgoogle.com