Seguramente mientras estás estudiando tu carrera universitaria te has puesto a pensar en las posibilidades de empleo que tendrás una vez que termines. Sin embargo, hasta que te enfrentes al campo laboral te darás cuenta de los elementos que intervienen para tener el trabajo con que sueñas. En ese momento la opción de ser emprendedor viene a la mente.
Y es que, cerca del 40% de los egresados, se emplean en el sector privado y 17% en el sector público. Pero, pertenecer a alguno de estos sectores no es la única opción disponible. El año anterior cerca del 16% de egresados iniciaron su propio negocio, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Egresados de la UVM.
Asimismo, una buena cantidad de profesionistas (38%) actualmente contempla abrir su propia empresa también pero… ¿Qué se debe hacer para que un negocio tenga un buen arranque? Hay diferentes puntos a tomar en cuenta, desde el aspecto estratégico hasta la cuestión de resiliencia y resolución de problemas.
Si estás considerando la idea de emprender al salir de la universidad, uno de los primeros puntos que podrían causarte problemas es el acceso a financiamiento y, aunque buena parte de las empresas, cualquiera que sea su tamaño o alcance, acuden a inversionistas o programas de apoyo, pocos saben que la manera en que deben acercarse a los posibles inversores es diferente según el caso.
“Es muy importante contar con un ecosistema o comunidad de emprendedores con quienes puedas platicar sobre tu empresa y revisar lo que puede funcionar y lo que no, así como orientarte para realizar buenos discursos de ventas. Hay que identificar dónde están los clientes y aprender a comunicar la idea de nuestros productos. En las primeras fases, tratar de ir por inversionistas nunca funciona. Lo que tienes que hacer es buscar programas de apoyo que validen lo que haces y den soporte a lo que tratas de hacer”. Lo anterior lo señaló Stephen Mooney, dealmaker experto en expansión de emprendimientos.
Arma un buen pitch que motive pero que sea realista para tu negocio
Asimismo, explicó Mooney, durante los primeros años de una empresa es muy importante tener un enfoque estratégico por sobre las ventas pues eso llamará la atención de los posibles inversionistas quienes están mucho más interesados en leer reportes de negocio realistas, que en una descripción de tu producto.
“En un buen pitch nunca debes hablar sobre tu producto. Los inversionistas están interesados en saber cómo será el camino junto a un emprendedor como tú. Así que asegúrate de convencerlos de que hay un mercado mucho más grande y tienes el modo de acceder a él. Debes convencerlos de que tienes una estrategia, plantearles cómo vas a crecer y a dónde llegarás en caso de contar con su capital”, dijo Mooney durante su visita a México como integrante de la iniciativa Global Entrepreneur Programme (GEP) del Departamento de Comercio Internacional del Reino Unido
Pero, incluso si armas el mejor de los planes, es importante contemplar que los problemas sucederán en tu negocio. Como ocurre con todos los emprendedores y empresarios, no siempre obtendrás los resultados esperados o el apoyo de los inversionistas que te interesan. Pero no te preocupes: es parte de la resiliencia que, como empresario, debes desarrollar, no solo para sobrellevar este tipo de situaciones sino para ser un buen líder frente a tu equipo de trabajo.
“No se trata de pensar en cómo resolver un problema, sino quién puede. A quién acudir, con quién platicar que haya estado en la misma situación. Es importante buscar empresas que te compartan experiencias para ver tus problemas desde otra perspectiva. Además es importante tener estas conversaciones con los miembros de tu equipo para transmitir el sentido de resiliencia en cada uno, evitando generalizar esta comunicación”, finalizó Milo Skene, master coach, director de 18-07 careers e integrante del GEP.