¿Alguna vez te has preguntado cuál es el origen de las Fiestas Patrias? un experto de la UNAM te responde. La primer conmemoración del Grito de la Independencia no tiene nada que ver con las reuniones actuales en las que disfrutamos pozole, pambazos, elotes y escuchamos música mexicana. 

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Este 16 de septiembre conmemoramos el 213 aniversario del inicio de la Independencia de México; y para ello, diversas familias se reúnen a cenar comida típica mexicana la noche del 15, y después ven el Grito de Independencia que da el presidente Andrés Manuel López Obrador. 

Otros más pueden sumarse a las actividades que las alcaldías ofrecen para no pasar desapercibido el movimiento que logró separar a México del dominio de los españoles; sin embargo, estas celebraciones son lejanas a la primera conmemoración de la Independencia, y un académico de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM explica porqué.

¿Cuál es el origen de las Fiestas Patrias?  

De acuerdo con el profesor de la UNAM, Israel Álvarez Moctezuma, la primer celebración del Grito de Independencia no tenía actividades culturales y representativas mexicanas; sino que era una celebración religiosa, “porque todo tenía que ver con la religión en aquellos años”, por ello “el cura Hidalgo usa las campanas de la iglesia, en ese entonces le daban sentido y forma a la vida de los pueblos y ciudades”, explicó. 

En una entrevista para Gaceta UNAM, el profesor de la Facultad de Filosofía y Letras detalló que la primera celebración del Grito se dio en plena Guerra de Independencia; porque el movimiento fue de 1810 a 1821. En 1812, José María Morelos fue el primero en conmemorar el aniversario número uno del levantamiento en armas. 

¿Cómo se separaron de la iglesia las Fiestas Patrias?

El origen de las Fiestas Patrias tal cual son ahora, fue a cargo de Maximiliano de Habsburgo; quien le dio un sentido más lúdico y festivo. E incluso, el Archiduque de Austria fue el primero en repetir el Grito de Independencia y el discurso republicano de Miguel Hidalgo y Costilla. 

Estas se tornaron más lúdicas y festivas con la finalidad de que después del dominio español, los mexicanos construyeran una identidad nacional con signos identitarios unificados; porque la sociedad novohispana estaba dividida. Lo anterior debido a que nadie se reconocía como mexicano tras el sometimiento español.

Aunado a la falta de identidad mexicana, la sociedad estaba dividida entre los conservadores vinculados a la iglesia católica y a las instituciones de la monarquía; y los liberales que buscaban la construcción de una República con división de poderes y la independencia del Estado de entidades religiosas. 

Por estos enfrentamientos, se requirió al uso del festejo de la independencia como unificador de la identidad nacional; la cual se consolidó después de la Revolución, en el siglo XX, en el cual surgió la estética de los charros, la comida mexicana y el mariachi. Estos símbolos, junto con la mercadotecnia del estado nación, y los grandes discursos cinematográficos, forjaron la cultura mexicana. 

¿Cómo fue el primer festejo lúdico de la Independencia?

Maximiliano de Habsburgo implementó la celebración del Grito de Dolores con inspiración en los festejos de la Independencia de España; porque se dio cuenta que era “una celebración que desvinculaba el pasado prehispánico y marcaba el inicio de una nueva monarquía”, puntualizó Israel Álvarez Moctezuma. 

Los festejos del Maximiliano de Habsburgo no tuvieron mucho éxito; porque como él era extranjero, las familias republicanas no lo apoyaban. Y, el éxito de las Fiestas Patrias se dio con el centenario de la Independencia con el mandato de Porfirio Díaz, quién hizo un festejo en grande antes de que se acabara su régimen, porque necesitaba unir a la gente que estaba en contra de su gobierno antidemocrático.