El pasado lunes 8 de mayo alrededor de cuarenta encapuchados irrumpieron de manera violenta en las instalaciones de la UNAM, específicamente en la Dirección General del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) y la Dirección General de Presupuesto, en Ciudad Universitaria.
Desde el mes pasado la máxima casa de estudios se ha visto envuelta de diversas manifestaciones por parte de su alumnado, debido a la incertidumbre que se generó por la posible desaparición del Programa de Becas Elisa Acuña y por problemas de seguridad en sus diferentes unidades.
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¿Cuáles fueron los daños registrados?
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó mediante un comunicado que los encapuchados retuvieron en contra de su voluntad a personal administrativo por varias horas y causaron daños importantes en ambos inmuebles.
La máxima casa de estudios aseguró que las personas embozadas causaron diversos daños materiales entre ellos rompieron los cristales, cortaron cables de electricidad e internet, así como las protecciones de ventanas.
También se reportaron daños a equipos de cómputo, electrónico, de fotografía, de video, y mobiliario en general de las oficinas de las dos direcciones. La universidad señaló que se está verificando si hubo sustracción de equipo o materiales.
¿Qué exigían los manifestantes?
Videos en redes sociales muestran a los manifestantes bloqueando la avenida Insurgentes Sur en ambos sentidos, así como el paso del Metrobús, presentando diferentes consignas.
Dentro de las exigencias los encapuchados se encontraban, el continuar con el programa de becas de manutención, e incluso propusieron que se lleve a cabo una auditoría a este programa.
Además de pedir por la mejora de condiciones y seguridad en los distintos planteles, tanto de CCH como de la Escuela Nacional Preparatoria y las Facultades.
Asimismo exigieron la creación de un órgano interno para la defensoría de mujeres y la comunidad LGBTIQ+.
La Universidad aseveró que fueron varios sus intentos por dialogar con los manifestantes para lograr conocer y atender sus demandas, sin embargo estos intentos fueron rechazados por horas.
La UNAM condena los hechos
La máxima casa de estudios comunicó que condena los hechos vandálicos y también el daño al patrimonio universitario, bajo el principio de que una protesta no puede ser medio ni justificación para realizar actos propios de organizaciones criminales y que en el fondo tiene como objetivo desestabilizar a la Universidad.
Con información de El Universal