Facultad de Administración de la BUAP. Foto: Administración BUAP
Los paros en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) siguen marcando la agenda universitaria en 2025. Tras una semana de huelga en la Facultad de Medicina y seis mesas de trabajo, las autoridades llegaron a varios acuerdos y el paro en esta unidad académica llegó a su fin.
Sin embargo, como te informamos anteriormente en Generación Universitaria, otras entidades de la universidad aún mantienen sus protestas y siguen en negociaciones con las autoridades.
En Ciudad Universitaria, los estudiantes entregaron las demandas de distintas facultades a la BUAP, pero el paro continúa. Se acordó que no se levantará la huelga hasta el cumplimiento de las solicitudes de todas las entidades académicas. Debido a esto, los directivos de la Facultad de Administración condicionaron su regreso a clases a la liberación de CU.
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El Complejo Cultural Universitario mantiene su protesta mientras las autoridades continúan con las mesas de diálogo. En este espacio, los estudiantes organizan actividades recreativas para la comunidad universitaria.
Mientras tanto, las facultades de Filosofía y Letras, Psicología y Lenguas se unieron bajo el nombre de “Alianza Centro” y, al igual que en CU, establecieron que ninguna unidad regresará a la normalidad hasta que todas sus demandas sean escuchadas. Además, exigen mesas de trabajo tanto con rectoría como con sus directivos.
En la Facultad de Contaduría ya hubo un acuerdo. Tras varias mesas de diálogo, las autoridades y la rectora firmaron el pliego petitorio, lo que permitió la reanudación de actividades. Mientras tanto, en la Facultad de Derecho, los estudiantes entregaron sus peticiones y están a la espera de iniciar las negociaciones con las autoridades.
El pasado 6 de marzo, la rectora Lilia Cedillo pidió a la comunidad estudiantil confiar en las comisiones que atenderán sus demandas. A su vez, prometió que no habrá represalias ni intimidaciones y destacó que este movimiento puede ser una oportunidad para mejorar la universidad.
“Este movimiento nos da la oportunidad de ser mejores, de corregir y reorientar acciones. No vamos a tomar medidas que incomoden o intimiden a los estudiantes. Necesitamos su voto de confianza hacia las comisiones y hacia la institución. Las diferencias se resuelven cuando se dialogan. Aquí no hay bandos, porque somos una sola familia universitaria”.
Lidia Cedillo, rectora de la BUAP.
Para dar seguimiento a las exigencias de los alumnos, el Consejo Universitario aprobó la creación de comisiones especiales integradas por directores y funcionarios. Aunado a esto, la académica reconoció que las estrategias contra el acoso no han funcionado y propuso canalizar las quejas directamente a la Defensoría de los Derechos Universitarios.
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Como una medida adicional, ofreció un canal directo para denuncias en el correo larectorateescucha_acoso@correo.buap.mx, y aseguró que ella misma revisará los casos.
Por último, Cedillo invitó a la planta académica a escuchar a los alumnos y mejorar la forma en que se imparten las clases. También agradeció a la comunidad por su apoyo a la institución y pidió que estos conflictos sirvan para fortalecer los lazos universitarios.
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