Más que animales de compañía los perros y gatos son parte de nuestra familia, por eso procuramos estar pendientes de su salud. Así que, ante el deceso en la temperatura debemos extremar precauciones para evitar que desarrollen enfermedades o se agudicen los cuadros clínicos que padecen. Por eso una experta de la UNAM nos dice cómo proteger a nuestras mascotas del frío.
Señales para identificar que nuestra mascota tiene frío
Ylenia Márquez, académica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM explicó que “las temperaturas frías ponen en un estrés metabólico al cuerpo, tanto de humanos como de animales”. Por lo que para saber si el clima está repercutiendo en el cuerpo de nuestro animales de compañía es necesario prestar atención a algunas señales.
Según indicó la especialista, en nuestras mascotas se inician diversos procesos metabólicos con los que su cuerpo busca defenderse del frío, aumentando su temperatura corporal.
Sin embargo, cuando esto no es suficiente, en nuestras mascotas se activan algunos mecanismos de reacción al frío ambiental a los que debemos prestar atención. Por ejemplo: se encogen, enroscan para cubrir su abdomen o tiemblan de frío.
¿Cuáles son los grupos de riesgo?
En cuanto los grupos a los que se debe prestar más atención, la académica señaló que existen dos: cachorros y animales de edad avanzada pues son “los dos grupos más ineficientes para retener la temperatura porque tienden a perderla con más facilidad.”
De hecho, “en los pacientes geriátricos, algunas patologías preexistentes los hacen enfrentar el frío de manera menos eficiente”. “Se incluyen los que tienen patologías ortopédicas o articulares que generan dolor, las cuales se acentúan con el frío.”
Así como “pacientes con enfermedades debilitantes, como insuficiencia renal, cardiopatías o cualquier enfermedad metabólica crónica, serán más susceptibles a las bajas temperaturas porque el desgaste metabólico será mayor.”
Mientras que “los cachorros son especialmente susceptibles porque tienen menos cantidad de grasa corporal y su metabolismo aún es inmaduro para enfrentar la temperatura”.
Animales de compañía con mejor adaptación
La especialista puntualizó que antes de elegir una mascota es necesario que las personas evalúen a conciencia cómo es el clima en su entorno, dado que “los animales que van a ser capaces de resistir temperaturas muy frías son los que están preparados para eso”.
Es decir, “para zonas con climas extremos, como los polos, el ser humano ha diseñado razas específicas, como el Husky o el San Bernardo, perros con doble capa de pelaje –tienen un pelo largo y duro, y si abrimos el pelaje en el fondo tienen pelo algodonoso, más suave–, cuyo objetivo es evitar que circule aire, que quede atrapado, lo que los protege de perder temperatura”.
Asimismo, la maestra en medicina crítica para perros y gatos expresó que “los perros de pelaje corto o que no tienen pelo –cómo los xoloitzcuintles– pueden ser más sensibles a esta pérdida de temperatura por el frío ambiental. Pacientes que son muy delgados, como los lebreles, o que tienen poca grasa corporal, serán menos capaces de retener su temperatura corporal ante el frío”.
Vigilar a nuestros gatos en temporadas frías
Los dueños de gatos deben ser precavidos pues en temporadas de bajas temperaturas estos animales buscan lugares cálidos para tomar una siesta. El problema es que muchos “buscan lugares como calentadores o motores de carros, esto último es especialmente peligroso porque se esconden dentro del motor y al echarlo a andar se lesionan, queman u otras situaciones más graves”.
Y advirtió que “debemos tener cuidado cuando tienen frío porque van a buscar un lugar donde refugiarse, y si nosotros no les proveemos un lugar seguro, pueden causarse lesiones”.
¿Es bueno ponerle ropa a nuestras mascotas para protegerlas del frío?
Ylenia Márquez comentó que si bien el pelaje es la “ropa” con la que cuentan la mayoría de nuestros animales de compañía; en ocasiones se presta poca atención a su cuidado “y precisamente en las épocas de frío se ve el resultado de un pelaje bien cuidado y sano, que les brinda protección”.
Así que, “lo ideal es que mantengamos su pelaje sano y limpio, para que no tengamos que cortarlo por problemas de nudos; debemos mantenerlo sano para que esté listo para protegerlos”. Pero en algunos casos, como en animales “que no tienen pelaje largo, de doble capa o incluso que no tienen pelo, como los xoloitzcuintles, se utilizan otros medios para protegerlos”.
Entre esos medios se encuentra la ropa para mascota, la cual debe cumplir con algunas características. Por ejemplo:
- Debe ser cómoda para nuestras mascotas.
- No debe tener objetos que puedan desprenderse, como botones, porque podrían tragarlos.
- Se debe revisar muy bien que no les generen rozaduras en las zonas de fricción, como axilas, ingle, pecho y cuello.
- Seleccionar ropa que los abrigue y no solo que sea atractiva a la vista.
Finalmente, agregó que para evitar riesgos debemos proveer a nuestras mascotas de una zona que los proteja de la temperatura ambiental. Además de darles “una cama limpia y techada que el animal sienta como segura y cálida”.